Incluimos en la sección Poema semanal, un nuevo poema del libro La transfiguración de la Lira, ópera prima de quien suscribe estas líneas, y al que contemplan ya veintisiete años.
LA
TRANSFIGURACIÓN DE LA LIRA
EL verso y la ribera
en par de las corolas se respira:
estrella, dulce esfera
del río que suspira
los lirios blandos de su blanca lira:
ESTA luz reflexiva
está midiendo al sueño la armonía:
la yerba pensativa
trazó geometría,
y enlazaba su luz la poesía;
E indemne suscitaba
murmurando:
Deshace candileja
mi voz, si en luz acaba
la cárcel que refleja
tu lira grave entre mi suave reja.
LA fronda la paloma
nívea percutió del coro y lira
al canto del aroma:
Sonido le suspira
la cuerda leve que su vuelo inspira.
Y la yerba pagana
del místico reflejo se examina:
Toda invención hermana,
toda imagen divina
robada de su espejo y cristalina.
SOBRE enhiesta e inerme,
no se alza con su nombre, si ora gime,
ni irisa, si se aduerme,
certeza donde imprime,
líneas de agua que efímeras redime.
SIEMPRE deidad narcisa,
inmóvil si sensible, mariposa
retorna a dar en risa
la cristalina rosa,
claroscuro de plata decorosa.
¡BEBE amor, la primera
nieve de tu reflejo apenas, bebe
nieve de aquella esfera
sol de la misma nieve,
sol del espejo en su reflejo leve!
NOMBRADOR se realiza,
belleza que sin nombre se recrea;
diamante de ceniza,
cendal que musiquea:
¡Hágase la poesía, torne, sea!
Francisco Acuyo, de La transfiguración de la Lira
Un poema hermosísimo, que revive lo mejor de nuestras letras. Me siento honrado y transportado a las altas esferas de la poesía, amigo mío. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy bueno y sentido!!!
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