Para la sección de Poesía del blog Ancile, traemos un nuevo post dedicado a la versión bilingüe en español e italiano de los poemas de la poeta Rosaura Álvarez, bajo el título de Meriggiare, antología poética, con traducción del profesor Rosario Trovato.
MERIGGIARE : ROSAURA ÁLVAREZ EN ITALIANO
Algra editore (https://www.algraeditore.it/) ha publicado recientemente Merigiare, un volumen con poemas de Rosaura Álvarez seleccionados, traducidos y prologados por el profesor Rosario Trovato, quien al final del prólogo escribe: “Con esta edición antológica de su poesía se ha querido dar a conocer al público italiano una poeta que ha sabido ofrecer una visión moderna y vivificadora de la realidad y del destino humano”.
Se
incrementa, así, la excelente nómina de autores de lengua española que el
profesor de la Universidad de Catania acerca a los lectores italianos, iniciada
con Fábula de Polifemo y Galatea de Góngora, considerada la mejor
versión hasta ahora al italiano, nómina que cuenta con nombres como Lope de
Vega, Bécquer, Pardo Bazán, Unamuno, José Martí, Pedro Salinas, Octavio Paz,
etc., y que dedica especial atención a escritores granadinos como Pedro Antonio
de Alarcón, Federico García Lorca, Elena Martín Vivaldi, Rosaura Álvarez y
Antonio Carvajal, además de estar actualmente dedicado a la traducción de Paraíso
cerrado para muchos, jardines abiertos para pocos, de Pedro Soto de Rojas.
Modernidad
vivificadora: la poesía de Rosaura Álvarez esplende en ambas lenguas con su
cristalizada musicalidad, contención en la expresión de la sensualidad grata,
suave melancolía, y muestra, con la aportación del poema inédito final, la combinación
magistral de narratividad histórica y lirismo evocador, cómo cabe elaborar
nuevos textos épicos sobre iniciativas de mejora social, sin caer en lo
panfletario.
No cabe
sino elogiar y agradecer esta generosa labor de difusión de nuestros mejores valores
literarios.
Dionisio Pérez Venegas
¿PARA QUÉ?
A nadie cuentes –¿ para
qué?–
este espejo de grávida nostalgia
al contemplar un alma
que tanto ardió,
aunque nieve se sabe en el olvido
de su estar,
de su aire.
A CHE SCOPO
Non
raccontare a nessuno – a che scopo? –
questo specchio di greve nostalgia
quando si contempla un'anima
che tanto arse,
anche se neve si sa nell'oblio
del suo stare,
del suo piglio.
Si supieras, mi dios, el
duro estío
de tu presencia ausente, este morar
donde la luz no canta,
ni el silencio conversa,
y es acero la blanda brisa
que en el jardín se esparce.
Si supieras la noche
intacta del desvelo,
si fría luna filtra
claror opaco de lo tangible
y luce el alba holandas de sudarios.
de aquel tu aliento nada
aroma en mi agostada carne, y vivo
cual mentidas las glorias de tu estar.
SE SAPESSI
Se sapessi, mio dio, la dura estate
della tua assente presenza, restare
dove la luce non canta,
né il silenzio conversa,
ed è acciaio la dolce brezza
che nel giardino si spande.
Se conoscessi la notte
intatta dell'insonnia,
se fredda la luna filtra
chiarore opaco del tangibile
e l’alba fulge tele di sudari.
Se sapessi, mio dio, che già
l’humuvia[1]
di quel respiro tuo nulla
nella mia carne secca aroma, e vivo
come mentita gloria del tuo essere.
SOÑADO UNIVERSO
Para
Antonio Chicharro
Al cabo de los años,
vendando voy sangría de las horas
con pudor sumo de pincel y lápiz.
Voy, a tientas, desde la soledad
a otra soledad cercana
a la que dulce olvido
no puede dispensar ausencia.
Quizás por ello,
hacedora divinizada el alma
engendra con presura
artístico universo que
inicie albas sobre angustia tanta.
Tal vez, el arte solo sea
afán de que no acabe
signo auroral de tu materia.
SOGNATO UNIVERSO
Per
Antonio Chicharro
Dopo tanti anni,
metto la benda al salasso delle ore
con estremo pudore di pennello e matita.
Vado, a tentoni, dalla solitudine
a un'altra solitudine vicina
a cui un dolce oblio
non può l'assenza offrire.
Forse per questo,
l’anima divinizzata creatrice
genera con premura
artistico universo che
albe susciti sopra tanta angoscia.
Forse l'arte è soltanto
ansia che non finisca
segno aurorale della tua materia.
[1]“Humuvia”, termine che ho coniato dallo spagnolo per indicare il
petricore, l’odore caratteristico della terra bagnata dopo la pioggia. In
spagnolo esistono due termini, petricor
e humuvia, e mi è sembrato opportuno
acquisire in italiano anche humuvia che peraltro mi sembra più congruo visto
che deriva dal latino, humus (terra)
e pluvia (pioggia).
Excelente escritora y amiga.
ResponderEliminarEnhorabuena por esta publicación en dos lenguas románicas.
Que maravilloso y espléndido trabajo poético de Rosaura Álvarez. Todo un compendio emocional y de elocuencia profunda. Un abrazo especial.
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